"Cuando vas caminando ves tu entorno: las personas, la calle, los árboles, tus pies, tus manos... ¿pero tu rostro quién lo ve? Lo puedes ver en un espejo: ves si estás peinada o cualquier otro detalle... ¿pero quién ve más allá y sinceramente como eres por dentro? Un AMIGO. Pero no cualquier amigo, sino ese que te dice lo bueno y lo malo de ti. Ese que te ama como eres y que te hace sentir que esta ahí, que te dice cuando estas haciendo algo mal. Ese que te apoya con lo que te hace feliz, ese que te apaña aunque no le guste ir donde tu vas. Los amigos así funcionan como un espejo hacia tu interior".
"Las amistades se riegan día a día y no te das cuenta cuando ya tienes frutos. Algunas demoran más que otras, y siempre tiene que haber el valor para compartir los temores y dudas, para que el árbol crezca firme y sincero".
"La amistad es como un bote... un bote donde van dos personas remando. ¿Hacia dónde? Hacia donde la vida y Dios quieran".
"En la vida te subes a distintos botes y con el tiempo vas viendo a qué destino llegan. Lo importante es saber si remas o no. Y en todo es así con las decisiones que tomas: con las personas que conoces, con todo. Tú decides si te subes al bote y si remas o no".
No hay comentarios:
Publicar un comentario